Un fototubo es un sensor de luz muy sensible.

Cuando la luz incide sobre la pantalla, que tiene un recubrimiento semiconductor, se produce una liberación de electrones (efecto fotoeléctrico) hacia el interior del tubo.

Un potencial eléctrico acelera esos electrones, haciéndolos impactar contra sucesivas láminas metálicas, liberando una cascada de electrones, que son suficientes para producir un pulso eléctrico detectable.